El hotel Itsas Mendia: la historia de una familia, una saga vasca
¿Han reservado una habitación en nuestro hotel, por internet, sin apenas conocernos? ¿Les ha gustado la decoración y las opiniones de nuestros clientes? O, ¿tal vez, nos conozcan desde hace tiempo? En cualquiera de los casos, qué gusto saber que van a venir. Sean bienvenidos al hotel Itsas Mendia…
Este hotel representa la historia de una familia, de una saga vasca. Permítannos que se la contemos, como cuenta uno el relato de una vida, tranquilamente, como se lo contaríamos a unos amigos en una sobremesa delicada y acogedora…
Una historia que empieza a finales del siglo XIX
Sin duda difícil de imaginar para ustedes que están plácidamente instalados en su habitación, que esta historia pueda empezar a finales del siglo XIX. Exiliado de Hegoalde, el País Vasco español, Domingo Etchayde se instala en Bidart para empezar una nueva vida… İSu vida!
Acompañado por su rebaño de vacas, se convierte rápidamente en el hombre de mantenimiento del médico del pueblo. Algunos años más tarde, Domingo compra la casa del doctor y el terreno adyacente a esta. Precisamente donde se encuentra usted hoy. La saga de la familia Etchayde puede empezar…
Los Etchayde son constructores
Casado con Leonie y con dos hijos, Domingo crea su propia empresa de construcción.
Gracias a su trabajo y a su esfuerzo, el patrimonio familiar se amplía, como prueban aun actualmente numerosas casonas del pueblo.
Su hijo Jean toma el relevo. El negocio prospera y entre obra y obra, agranda y reforma la casa de la familia. A principio de los 70, la casa (el hotel en el que se encuentran ustedes hoy) adopta su forma arquitectónica definitiva.
La casa familiar se transforma en una pensión
En los años 20, la casa se transforma en una pensión. Marie, la hermana de Jean y su esposa, Jeanne, se ocupan de ello. Un hotelero belga vino unos meses al País Vasco a enseñarles las bases del oficio, pero rápidamente las dos mujeres se convertirán en el alma de la casa.
Jeanne murió en 1987, pero Marie siguió siendo el pilar de este hotel hasta su cierre en 1996. Aun hoy, numerosos clientes recuerdan la impronta de esta extraordinaria mujer en el hotel. Tras una ocupada vida dedicada a su hotel, Marie nos dejó en 2004, con unos maravillosos 98 años.
Y comó este establecimiento es, sin duda, una aventura familiar, Jean-Marie, el hijo de Jean y Jeanne, estudio contabilidad para gestionar, hasta el final, el hotel de su madre y de su tía. Casado con Evelyne, tuvieron una hija Maider, que creció en los pasillos del hotel pegada a su tía abuela, Marie.
¿Falló algún relevo o hubo alguna cita fallida?
Puede que el relevo se produjera precisamente en aquellos momentos. Esa ilusión inalterable de realizar el mismo trabajo, de recibir y agasajar. Tanto es así, que a finales de los 90, Maider estudia cocina en el liceo hotelero de Biarritz, mientras que el hotel vetusto, cierra sus puertas… Al alba de un siglo nuevo, ¿la cita había definitivamente fallado?
En cualquier caso, los paseantes de Bidart y los turistas se extrañaban al ver el estado del hotel y lamentaban que estuviera cerrado. ¿Por qué esta fabulosa casa se encuentra abandonada?, se preguntaban. ¿A quién pertenece, ahora? Los rumores no tardaron en aparecer: que si la había comprado un príncipe saudita, que si había sido un diputado francés o incluso una cadena hotelera.
El hotel familiar renace
La respuesta se hace esperar hasta el 2008. Se vuelven a abrir las ventanas, numerosos obreros empiezan a trabajar, el hotel Itsas Mendia renace de sus cenizas… y sigue siendo una empresa familiar ya que la propia Maider, la protegida de Marie, alma mater del hotel, retoma las riendas con un inmenso coraje ya que el hotel se encuentra en un desastroso estado.
Tras dos años de obras, de quebraderos de cabeza y de problemas insolubles, finalmente resueltos y de innombrables dificultades, por fin, Maider puede acoger a sus primeros clientes en agosto del 2010. Muy orgullosa de poder continuar con la aventura de su familia y de volver a ofrecer a Bidart y a sus habitantes esta joya que había sido abandonada. Sí, porque el hotel Itsas Mendia forma parte de la memoria del pueblo, de su historia, de sus valores y de su esencia, que no es otra que la esencia del País Vasco.
En el nombre de todos nosotros
Estamos hablándoles de nuestro hotel Itsas Mendia y se nos estaba olvidando traducir su nombre… perdón. Pero ya verán, es muy sencillo. ¿Dónde estamos? Claro, lo han adivinado, estamos entre el mar y la montaña, exacto así es como se llama el hotel, literalmente y en vasco. Nuestro hotel, en el centro de Bidart está junto al mar y a dos pasos de nuestras queridas montañas vascas.
La historia de nuestra familia está ligada íntimamente al País Vasco. Hemos querido que nuestro hotel sea sencillo, con carácter y elegante, a imagen del País Vasco y de nuestra familia.
Pero no hay que olvidar que estamos en 2017, por eso hemos decidido proponer un lugar elegante a la par que distendido, una mezcla entre modernidad y tradición. De hecho, algunos muebles y sofás son centenarios, aunque restaurados por Maider y por su madre. En esa línea, les invitamos también a descubrir nuestra colección de postales de época, sitas en la planta baja. Será un placer, ya que nos sentimos muy orgullosas, comentarlas con usted.
Un hotel familiar de 15 habitaciones
Como habrán comprendido, deseamos que este establecimiento, regentado por la cuarta generación de constructores, de apasionados de la camaradería, sea el suyo, que ustedes se sientan aquí como en casa.
Cada día hacemos lo posible y lo imposible para que ustedes vivan una experiencia inolvidable, pero… aunque nos esforcemos en ello, siempre podremos perfeccionarnos, por ello nos encantaría recibir sus sugerencias y consejos.
En cualquier caso, nuestra mejor recompensa es su fidelidad. Y si es su primera estancia entre nosotros, considérense como un miembro más de nuestra gran familia.
Milesker (muchas gracias), por participar también en la historia de esta saga vasca…
Post-scriptum: ahora bien, el establecimiento se exime de toda responsabilidad en caso de adicción al hotel. ¿Un antídoto? Disfruten de una larga estancia en el hotel Itsas Mendia, en Bidart y en nuestra tierra vasca. Tengan por seguro que serán magníficamente acogidos.
